En el pecho mares muertos
y en la garganta agua estancada
arenas movedizas en el vientre
arena erosionada al subconsciente
llueven los ojos lluvia retenida
lluvia fina que pasa apenas percibida
pero empapa
y el agua que ahoga y no lava
se pone a horcajadas sobre la espalda
y como pesa la ropa mojada
ay si pudiera achicar mi barca,
equilibrar los charcos
andar con pies descalzos
sin miedo a cuartearlos
ay si pudiera deshacer el barro
y esculpirme otra
que no quiero estar rota
ni ser papel mojado
deshecho y arrugado
En la cabeza tsunami de ideas
y en las muñecas olas que aprietan
ay si pudiera borrar las huellas sobre la arena
ay si pudiera borrar las penas